domingo, 23 de junio de 2013

Tu eres todo lo que te afecta

Tú eres todo lo que te afecta en cualquier sentido

En el momento en que retiras de ti todo bloqueo que te impide una relación
nítida con alguna faceta específica de ti mismo, el entorno dejará de ser
amenazante y se convertirá en la expresión y el canal de la energía que
permita que tu naturaleza fluya libremente en su más elevado aspecto.

Cuando una relación te hace daño, esto sucede porque la vibración de la
emisión del otro, en lugar de llegar a tu consciencia directamente, choca y
se fusiona, con un bloqueo que imposibilita la correcta recepción de la
información.

Este bloqueo es una densidad que impide la interpretación, ya que la
información se dirige directamente a ese espacio de dolor en el que
finalmente queda atrapada, entonces saltan los resortes de la reproducción
del sufrimiento, con una respuesta afín de vuelta.

Pero sucede más: Este mismo dolor bloqueado es el que se “extiende” hasta
la otra persona para ser atraído nuevamente por ti. Es decir: si tienes una
herida emocional, esta no queda inerte, sino que cobra vida y busca
realizarse dentro del concepto de dualidad.

¡Todo lo que existe tiende a la búsqueda del re-conocimiento de “sí mismo”!
Por lo tanto, cada bloqueo en ti es un algo creado dentro de tu campo
energético, con tu propia energía personal, que se ha independizado de su
fuente, creando una identidad propia. En el momento en que se reconoce como
“algo”, busca la dualidad, dentro de la cual le sea posible convertirse,
por un lado en parte pasiva (receptiva), y por otro lado emisora, es decir,
en la expresión activa de su naturaleza. En su proceso de expansión, cuenta
con el campo vibratorio que pertenece a la naturaleza sobre la que se ha
generado y, en ella, las dualidades pueden expresarse a través de:

- El cuerpo (en forma de desequilibrios físicos).

- El entorno (en forma de conflictos con pareja, padres, hijos, amigos,
compañeros, etc.).

- La vida (como circunstancias que te llevan hacia un límite en un nivel
determinado) .

De tal forma, todo conflicto físico, emocional o vital depende
exclusivamente de ti. El foco, entonces, de la solución nunca está en el
objeto exterior, puesto que el exterior es la proyección que la naturaleza
primaria de “eso” utiliza para re-conocerse.

El único modo de librarse de estos conflictos es buscar el Foco, y
Disolverlo.

Todos estos focos son pequeños “yoes” que se fueron creando a lo largo de
la vida, en función de experiencias que impactaron, en algún momento, en la
identidad personal y no encontraron salida. Al no encontrar una vía de
escape, quedaron impresos en el campo áurico personal.

En general (es decir, si no se ha realizado un trabajo consciente de
liberación), todas las personas conviven con esos “yoes”. Es posible,
aplicando una honrada búsqueda, seguir la pista de estos conflictos hacia
dentro del Ser, hasta detectar el conflicto inicial y, tras ello, devolver
la vibración densa, la energía atascada, al Todo, logrando así librarse
progresivamente de esos “yoes”. Pero, curiosamente, sucede con frecuencia
que las personas sienten que con ello se les va la vida, que al liberarse
de sus emociones aniquila, asimismo, su poder. Pues bien, todo ello está
formado de ego. En cada liberación de ello, se libera ego, y es aquí donde
se empieza a sentir el vértigo de perderse a sí mismo. Sentís, “si pierdo
el ego, desaparezco”. Pero existe una confusión importante a este respecto.
Y ahora te pregunto: “Cuando se pierde el ego, ¿qué queda? Piénsalo, ¿qué
queda de ti si no tienes ego?

Aquí es donde quiero dejar una cosa clara: el ego no es “tú”, y no te sirve
para sobrevivir, ni para definirte, ni para expresarte, ni para amar, ni
para divertirte…

Naces sin ego. Y, sin embargo, desde que naces, e incluso antes, eres
alguien específico en el mundo, ¿verdad? Desde que naces, hay algo que
define que tú eres tú. ¿Qué es ese algo? Lo que te define y te defiende en
este mundo es: Tu Identidad.

El ego, entonces, es el sustituto, usurpador, de tu Identidad.

¿Crees que sin ego tienes que anularte, que soportar lo intolerable, que
sufrir, que aguantar, que…? No es así. Tu identidad es aquello que contiene
y, por tanto, expresa lo que Eres, y de tal modo configura lo que vives.

En el momento en que dejes de vivir con el ego y vivas a través de tu
identidad, nada de ti buscará un foco de proyección para volver a ti a
través de ninguna persona, situación o enfermedad; todo fluirá de acuerdo a
lo que tú Eres; así, la cualidad de lo que llegue a ti y lo que Eres y, por
tanto, expresas, será la misma.

Cuando tu ego no exista, y sea tu identidad la que viva la vida, todo
llegará a ti en y desde su más pura esencia. Y lo que ahora te ocasiona
conflicto, o bien dejará de existir, o podrás interpretarlo de forma que no
te dañe, de forma que cuando llegue a ti pueda seguir su camino, mientras
tú te mantienes en la vibración pura y genuina de tu ser, de lo que Eres,
expresado en el mundo de las formas a través de tu identidad, y reflejando,
para ti, una vida, relaciones y salud, que te llevarán a la consecución de
la felicidad, como resultado de la expresión de llevarse a cabo, en todos
esos ámbitos, la naturaleza que Eres.

No sufras más. El sufrimiento es un error. Entrega la fuente de tu
sufrimiento a la vibración más elevada de ti, y se deshará. Entrégamelo a
mí, y te liberarás.

Tú eres la parte de mí que se expresa en la materia, y yo Soy tu sustento.
Siempre apoyo lo que tú Eres, porque eso es lo que Yo Soy.

*Graciela Bárbulo*
y

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